Rosarito
Irrumpen fuerzas armadas en ostentosa boda y causan destrozos y robos
Por Juan Pablo Sebastián
Momentos de pánico vivieron invitados y avecindados de rancho 40 la tarde del sábado 17 de julio cuando fuerzas armadas irrumpieron en una ostentosa boda que se celebraba en un rancho ubicado a las faldas del Cerro Coronel.
Dos helicópteros, un camión de redilas usado para transportar verduras y una gran cantidad de camionetas tipo pick up, rodearon el rancho para no dejar entrar ni salir a nadie.
A puntas de armas largas, los elementos sometieron a todos los invitados hombres y mujeres incluyendo a los dueños del rancho que habían rentado la cabaña y capilla para la boda de una pareja residente de Tijuana.
Los niños estuvieron a salvo en el área de guardería que la empresa organizadora del evento procedente de La Meca, Jalisco, habilitó en los cuartos de la cabaña.
Vecinos del poblado se sorprendieron al ver la presencia de los helicópteros sobrevolando la parte alta del cerro donde se ubica el rancho, mismo que se puede observar desde la entrada a Ciudad Misericordia en la parte baja.
Aparentemente discreta por su ubicación en una zona alejada pero cada vez más frecuentada por senderistas y amantes del turismo de aventura, la boda presumía un lujo desmedido, con mesas, sillas y manteles en tonos dorados, con un cielo del mismo color en la pista elaborado de manera artesanal con material colgante, luces y adornos extraordinarios, además de finos adornos hechos con flores costosas y algunas importadas de Holanda, sin mencionar que tenían contratada la presentación de una popular banda norteña de Tijuana.
Expertos en fiestas y banquetes estimaron que el gasto en esta boda fácilmente podría superar los 2.5 millones de pesos.
A diez minutos de iniciada la fiesta, el lujoso montaje de la boda comenzó a ser destruido tras el arribo de las fuerzas armadas.
De manera extraoficial de acuerdo con algunos testimonios de residentes que presenciaron el operativo, entre las corporaciones que participaron en el aparatoso operativo estaban el Ejercito Mexicano y la Fiscalía.
Fuentes oficiales consultadas posteriormente, revelaron que fue una orden de cateo ejecutada por la Fiscalía con el apoyo del Ejército, donde se detuvo a una persona con antecedentes delictivos.
Los agentes armados separaron a hombres y mujeres y luego hincaron a todos.
Se dirigieron principalmente con la persona contratada para organizar la fiesta y con el novio a quienes entrevistaron por separado, pero a ninguno de los dos detuvieron.
“Escuché que golpeaban a uno que puso resistencia y que llegaban más y más soldados. Yo cerré los ojos porque no quería ver nada y solo hacía lo que me ordenaban. Escuché que se dirigieron al área de banquete y ordenaron que les dieron de comer rápido, comieron como cerdos, desesperados, comieron de todo lo que había”, dijo un testigo presencial.
Además de los destrozos, los agentes revisaron los bolsos de los invitados y del staff de la empresa organizadora de la fiesta, a quienes les robaron pertenencias, dinero y teléfonos celulares.
Al organizador le robaron más de 60 mil pesos que tenía para el pago a proveedores y empleados, pero fueron considerados dejándole dinero suficiente para regresarse a su sede en La Meca, Jalisco, de donde fue contratado vía Facebook,
De manera extraoficial se supo que solamente fue detenida una persona, padrino de los novios.
“Revisaron los bolsos de todos, a las mujeres les robaron hasta sus abrigos, a todos nos quitaron los teléfonos celulares y no nos los regresaron. Se llevaron el dinero de los trabajadores, de los proveedores, nos dejaron sin nada”, lamentaron empleados.