Rosarito
Más del 30% de internos por robo son reincidentes: Sistema Estatal Penitenciario
Por Juan Pablo Sebastián
La Jefa de Reinserción Social de la Subsecretaria del Sistema Estatal Penitenciario, María Cristina Mariscal Velásquez, reconoció que la reincidencia en internos en Baja California es significativamente alta, principalmente en el delito de robo en todas sus modalidades.
Al asistir de invitada con el grupo Madrugadores que preside Carmen de la Toba, el miércoles 10 de abril, la Psicóloga especialista en rehabilitación social estimó que más del 30% de los internos por robo, reinciden en la comisión de este delito una vez salen de prisión, lo que representa una cifra alta considerando que en Baja California existen más de 11,000 internos en las diferentes prisiones.
Curiosamente, la reincidencia en internos que purgan delitos de tipo sexual, es de apenas el 2%, mientras que en homicidios es de tan solo el 1%.
El principal factor que propicia la reincidencia es el entorno y las amistades con las cuales se juntan los internos al salir de prisión, pues muchos de ellos regresan con los mismos amigos, conocidos y lugares donde se enviciaron.
Destacó que el Sistema Penitenciario en Baja California maneja una diversidad de programas enfocados al desarrollo humano y a la reinserción social de los internos, pero lamentablemente siguen ganando terreno las drogas y los entornos negativos, además de la decadencia de las familias como instituciones y pilares de la sociedad.
Al igual que funcionarios del Instituto de Psiquiatría, la especialista afirmó que los programas de prevención como el DARE y Escuela para Padres, pese a ser muy buenos, están fallando porque no llegan a quienes tienen que llegar.
En el caso del DARE y a pregunta expresa de Rosa Marina Arteaga González, quien destacó el esfuerzo que hacen los agentes DARE para llevar el programa a las escuelas, la funcionaria aseguró que mientras no se involucre a los padres en esta labor de prevención, el programa resultará infructuoso.
El ingeniero Rubén Oliva Ainza, destacó que para la labor de educar a los padres existe el programa Escuela para Padres y consideró que una estrategia efectiva sería coordinar los dos programas, a lo que la funcionaria contestó que este programa tampoco será efectivo si no llega a los padres vulnerables.
Dijo que en su larga experiencia en la aplicación de este programa, ha visto que los padres que acuden a tomar el curso tienen hijos que se portan bien, mientras que aquellos padres con hijos vulnerables no tienen tiempo de asistir por la necesidad apremiante de trabajar para llevar el sustento a casa.
“Llevo años trabajando con estos programas y puedo decir con seguridad que mientras no se trabaje con los padres que verdaderamente necesitan entender el problema, vamos a ser un fracaso. Resulta que los padres que toman el curso tienen hijos que se portan bien, pero lo que necesitamos es educar a los padres de hijos que se portan mal y que están propensos a caer en las drogas”, sostuvo la especialista.
Ante este panorama, dijo que es necesario implementar medidas para acercar estos programas a las familias y zonas vulnerables, y en horarios accesibles.
“Si seguimos impartiendo los cursos de 8 de la mañana a las 3 de la tarde, vamos a seguir siendo un fracaso, necesitamos implementar horarios donde los padres que verdaderamente lo necesitan puedan asistir, llevarlo a las plazas, iglesias, a los centros comunitarios…”, señaló.
En otros temas y a pregunta expresa de los asistentes, la funcionaria opinó sobre el polémico tema de la legalización de la marihuana.
Quitándose la investidura del Sistema Estatal Penitenciario, dijo que en su opinión muy personal la sociedad mexicana no está preparada para una iniciativa de este tipo, pues si bien terminaría con las muertes por el control de la venta de droga en las ciudades, el entorno social en que viven las familias mexicanas es extremadamente vulnerable a las drogas.
“Yo creo que no estamos preparados para una iniciativa de este tipo, porque cada droga afecta de diferente manera a los organismos. Puede ser que a unos no les pase nada, pero en otros la reacción puede ser diferente y causar muchos problemas a su salud y a la sociedad”, advirtió.