Rosarito
Burla Alcaldesa a restauranteros de Puerto Nuevo con supuesta clausura de obra del Calimax
Por Juan Pablo Sebastián
Como una burla tomaron restauranteros de Puerto Nuevo la supuesta clausura de la obra del Calimax, ordenada por la alcaldesa Mirna Rincón Vargas y ejecutada por el Director de Control Urbano Aldo López Tamez el lunes 15 de octubre.
Lejos de detenerse, la obra aceleró su marcha desde el mismo día de la clausura, en la que irónicamente solo fueron colocados sellos de clausura a los montones de castillos armados y a unos bloques de concreto, bajo la “presunción” de que serían utilizados para comenzar a construir.
“Ese mismo día que vinieron a clausurar por orden de la Presidenta, parece que les dieron luz verde, porque los movimientos de las máquinas avanzaron más rápido, como que sólo lo hicieron para calmarnos”, dijo una restaurantera quien se mostró sorprendida al ver la irrisoria clausura de Control Urbano.

Los castillos clausurados.
“Yo nunca había visto que clausuren solamente unos simples castillos y dejen toda la obra sin clausurar. Se supone que es una obra en proceso, el mismo letrero lo dice y los trabajadores lo han reconocido, que es obra de construcción del Calimax”, lamentó la denunciante.
La Presidenta del Comité Técnico de Puerto Nuevo, criticó que el Ayuntamiento autorice proyectos en Puerto Nuevo sin consultar al organismo que se creó precisamente para ese fin.
De hecho, dijeron no tener idea del diseño del proyecto ejecutivo de la obra del Calimax, sobre todo cuáles van a ser las rutas de carga y descarga.

Pese a no tener permiso de construcción, la constructora ha roto las aceras estampadas y derribado postes.
“No sabemos nada del proyecto. No sabemos si van a utilizar la calle trasera para carga y descarga. Si no es así, de cualquier manera nos va a afectar por la falta de estacionamientos. Los clientes que vengan al Calimax seguramente van a buscar estacionamiento en cualquier parte de Puerto Nuevo, se van a meter a las calles interiores y nos van a quitar el poco espacio que tenemos para nuestros clientes”, lamentó.
Otros restauranteros opinaron que la obra del Calimax además de representar una competencia para los comercios pequeños de Puerto Nuevo, dejará oculto el centro gastronómico, al quitarle vista desde la carretera Escénica y la carretera libre.
“Va a quedar hundido Puerto Nuevo, porque si se fijan, las calles interiores están hundidas respecto al terreno del estacionamiento. El Calimax es una obra grande y alta, que va a dejar abajo las calles de Puerto Nuevo, lo va a desaparecer”, agregaron denunciantes.