Rosarito
Baja aprovechamiento académico por clases virtuales
Por Juan Pablo Sebastián
Maestros de escuelas secundarias públicas advirtieron del grave retroceso educativo que se está gestando en las nuevas generaciones de estudiantes a consecuencia de la pandemia.
Aunque las clases virtuales continúan y aparentemente la mayoría de los alumnos cumplen con las tareas y ejercicios, el aprovechamiento académico es cada vez menor.
Pareciera que con el solo hecho de cumplir con sus tareas y asistencia a clases virtuales, sería suficiente para que los alumnos logren el aprendizaje en las diferentes asignaturas, pero profesores de educación secundaria aseguraron que no es así.
“No es lo mismo una clase presencial que una clase virtual, tengo alumnos que cumplen con las tareas pero no están aprendiendo, solo están cumpliendo con lo que se les pide”, sostuvo Felipe, maestro de la escuela Secundaria 32, quien atribuyó este fenómeno a la falta de supervisión y al hartazgo de los jóvenes por estar horas frente a un aparato electrónico.
El profesor explicó que bajo el modelo de clases virtuales es muy difícil saber si un alumno realiza sus tareas personalmente o alguien se las hace, pues es prácticamente imposible tenerlos bajo observación.
“Del total de alumnos que tengo, solamente el 50% está cumpliendo, el resto no lo hace por diversos motivos, que porque no tiene aparato, que no tiene dinero para ponerle saldo, que se quedan sin datos, que se les descompuso, pero la realidad es que a muchos les da flojera, como saben que no podemos reprobarlos”, sostuvo el profesor.
Ante estos problemas, señaló que algunos maestros han tratado de implementar estrategias para supervisar el desempeño de los alumnos, como pedirles videos donde ellos mismos expliquen temas o soluciones a problemas matemáticos.
Sin embargo, esta labor se torna tediosa para los maestros, al tener que revisar video por video de cada uno de los alumnos y además indicarles los errores en caso de haberlos y sugerirles un nuevo video que también deberán evaluarlo.
Frente a este panorama, dijo que se presentan también cosas que pueden resultar positivas para el aprendizaje de los alumnos, pues con el surgimiento de las redes sociales vino un incrementó de la lectura y escritura que realizan los alumnos.
Hoy como nunca los jóvenes leen mucho más gracias a las redes sociales y aunque muchos temas no tienen nada que ver con asignaturas académicas, representan un nicho de oportunidad que se puede canalizar a favor del desempeño de los alumnos en las áreas de lenguaje y comunicación.