Policiaca
Dejan libre a ladrones, pese a ser detenidos en flagrancia
Por Juan Pablo Sebastián
Indignados con el policía municipal, Miguel Ángel Marín Aguilar y con el Juez Ramón Celestino Medrano Aguilar, quedaron las víctimas de un robo a negocio de la colonia Mazatlán la tarde del 9 de mayo.
Más tardó la empleada del negocio en perseguir a los delincuentes, que las autoridades en dejarlos libre.
De acuerdo con las víctimas, el robo sucedió alrededor de las 4:30 de la tarde del miércoles 9 de mayo cuando una mujer ingresó al negocio de ropa y pidió a la empleada que le mostrara unos vestidos de maniquís.
A la hora de pagar intentó engañar a la empleada con un billete falso de 50 dólares, pero ésta lo notó y le dijo que no se lo podía recibir, al tiempo que se lo llevó a su patrona.
En ese lapso la mujer tomó el celular de la empleada que estaba en la mesa y abordó un vehículo que la esperaba afuera con otra mujer y una niña de aproximadamente 8 años de edad.
Era un vehículo Nissan Sentra color dorado con placas de circulación AKZ-73-16 y número de serie 647477, a nombre de Cristina Santiago Guevara.
La joven empleada corrió al vehículo y alcanzó a meter la mano por la ventanilla trasera para evitar que continuara circulando y gracias a que un eco taxi se le puso en frente al ver que era perseguido, la joven pudo reclamarle la mercancía robada.
La ladrona negó haber tomado los vestidos y también que había pagado con un billete falso, pero ante el insistente reclamo de la empleada, finalmente le regresó los vestidos.
Para entonces, la empleada no se había percatado que también había tomado su celular.
Al ingresar al negocio y darse cuenta que le hacía falta, volvió a correr tras el vehículo para reclamarle ahora el teléfono.
Esta vez los ladrones huyeron rumbo al Parque de la Ciudad.
La mujer pidió el apoyo a una mujer automovilista para perseguir a los ladrones y cuando los alcanzó, éstos ya venían de regreso con un hombre más a bordo.
Ante el reclamo de la víctima, la mujer ladrona juró por sus hijos que no lo tenía, pero nuevamente la empleada insistió y le advirtió que llamaría a la Policía.
Fue entonces que los ladrones le pidieron que los siguiera para llevarlos a un sitio de taxis donde lo habían dejado encargado, con el pretexto de que se le había agotado la batería.
En ese momento hizo su arribo el agente Miguel Ángel Marín Aguilar, quien según los denunciantes, lo primero que hizo fue dirigirse al sitio de taxis para pedir el celular robado, mismo que efectivamente estaba sin batería y también sin funda y sin chip.
En ese lugar fueron asegurados los tres delincuentes y la niña a quien supuestamente la entregarían al DIF Municipal.
Los denunciantes aseguran que el oficial Marín hizo lo imposible por proteger al delincuente, desde el momento en que no aceptó refuerzos policíacos y les mintió que estaban detenidos en las celdas.
“Vimos cuando se le acercó al delincuente y habló con él, algo negoció, porque nos trajo dando vueltas. Nos dijo que los llevarían detenidos a la Comandancia y nos pidió que fuéramos a verlos para constatarlo, pero cuando fuimos ya no estaban. Nos pidió que no denunciáramos, porque íbamos a andar en vueltas y además ya habíamos recuperado los artículos
Cuando llegamos a la Comandancia el Juez Medrano nos trató muy mal. Nos dijo que ahí no tenía a ningún detenido y le gritó a Marín que nos regresara las cosas y nos pidió que nos retiráramos, porque tenía otros casos más importantes que atender”, dijeron afectados.
Sobre el tema, el Juez Medrano argumentó que con el nuevo Sistema de Justicia Penal los detenidos por robo ya no son presentados a las celdas, sino turnados directamente al Ministerio Publico como sucedió en este caso, ya lo que decida el Ministerio Público si los rechaza o no, no es asunto suyo.