Rosarito
En su lucha contra el cáncer de mama, estudió la nivelación en enfermería en la UNAM: Yoly Ávila

Por Delia Ruelas
Estudiar la nivelación a la licenciatura de enfermería fue una motivación para Yolanda Ávila Chacón mientras luchaba contra el cáncer de mama, postrada en cama y con quimioterapia.
En su familia hay un registro de cáncer de mama, como lo fue una tía materna que falleció a causa de este padecimiento, a Yoly la diagnosticaron en el 2020 y en el 2021 inició radioterapia y quimioterapias, con un medicamento llamado Letfozol, el cual deberá seguir tomando hasta julio del 2026.
Cabe resaltar que para decir que una persona la ha librado de cáncer de mama deben de pasar 10 años después de sus quimioterapias, ya que en el transcurso de esos años se puede presentar metástasis a otras partes del cuerpo, así que Yoly aún se encuentra en la lucha por mantenerse sana,siguiendo con el tratamiento y realizando ejercicio pues es miembro del Centro Acuático Rosarito, además de realizar ejercicios de fuerza para mantener su masa muscular.
Ella comenta que recibir un diagnóstico de cáncer fue estresante y angustiante pues no se sabía con exactitud si ya se había diseminado a alguna otra parte de su cuerpo, ya que el radiólogo lo calificaba del 1-5 y pero ella se encontraba en el #5.
Su diagnóstico fue a los 47 años de edad, ella recuerda cómo una mañana se miró al espejo y observó un pequeño bulto en su pecho derecho, así que para salir de dudas se realizó un ultrasonido mamario, así fue que el 29 de noviembre el radiólogo le dijo que se encontraba en etapa 5 y debía ser operada de manera inmediata.
Su vida cambió drásticamente tras enterarse de que padecía cáncer, limitando su independencia, la fuerza en su cuerpo, “afectó grandemente mi salud, ya que dejé de caminar porqué el medicamento de la quimioterapia afecto mi sistema nervioso y duré postrada en cama más de 1 año sin poder realizar nada ni siquiera podía comer con cuchara desechable, pues no tenía fuerza en mi cuerpo”.
Aún postrada en cama y con quimioterapia Yolanda, decidió que el cáncer no sería un impedimento para continuar con sus metas personales, así que con el apoyo de su hijo y su pareja decidió realizar una nivelación de la licenciatura de enfermería. “Yo ya tenía 22 años de enfermera general y 8 de enfermera quirúrgica, estaba terminando mi especialidad de gestión y docencia en enfermería cuando me diagnosticaron, ya había presentado el examen a la Universidad Autónoma de México, para realizar mi nivelación a la licenciatura de enfermería, mis maestros me estimularon a que me esforzara y le dictara a mi computadora para poder realizar mis trabajos, el estar ocupada y mantener mi mente lo más activa que se pudiera era un motivo para muy fuerte para seguir estudiando ya que me ayudaba a no pensar en lo que estaba viviendo, me gustaba aprender más sobre lo más reciente que en mis años de formación no existía, así que el actualizarme me daba más información para cuidarme a mí misma”.
Pero no todos los comentarios eran de ánimos y entusiasmo pues por si fuera poco lidiar con la enfermedad también tuvo que sobrellevar comentarios negativos, “por parte de gente que me rodeaba me hacían comentarios que, para qué seguía estudiando si yo no iba a trabajar. Por otra parte recibí mucho apoyo por parte de mis maestros de la UNAM ya que me impulsaban a seguir adelante”.
Las clases que tomó fueron en línea y en ocasiones tenía clases vía zoom, fueron 2 años de nivelación, más un año de exámenes de inglés y tardó un año más para presentar el examen profesional por detalles de salud.
Aún recuerda que sus materias favoritas fueron aquellas que involucraban el acompañamiento a pacientes con enfermedades crónicas.
Hoy Yoly celebra una oportunidad de vida y también su nivelación de la licenciatura de enfermería, y es ejemplo de superación para todos.