Rosarito
Tren costero detonará desarrollo económico y turístico de la región
Por Juan Pablo Sebastián
Luego de darse a conocer que el Tren Costero de Baja California está proyectado dentro del Plan Nacional de Infraestructura del Gobierno Federal, líderes empresariales locales recordaron que se trata de un proyecto que ha sido impulsado por la iniciativa privada y que representará un detonante para el desarrollo económico y turístico de la zona fronteriza.
El empresario Hugo Torres Chabert detalló que el proyecto fue idea del señor Luis Correa Quintero, quien hace más de 8 años inicio los trabajos de gestión para lograr su aprobación en los sectores de gobierno a través de los organismos empresariales.
“Hace un par de meses me tocó presentarle a la alcaldesa Araceli Brown la propuesta del proyecto y sostuvimos una reunión donde el señor y compañero de la compañía donde presté mis servicios de auditoria en la Ciudad de México, Luis Correa, le detalló el proyecto completo y le informó que ya había sido considerado como un proyecto de infraestructura del Gobierno Federal”.
Recordó que el proyecto del tren costero nació como una necesidad para brindar nuevas y modernas redes de comunicación fronteriza que promuevan el desarrollo económico y turístico de la región, ofreciendo a los visitantes una manera más segura de viajar y la posibilidad de desplazarse sin necesidad de tener que manejar.
Información técnica detalla que el proyecto consiste en la creación de una ruta de tren que partiría de la Línea Internacional de San Ysidro y se dirigiría por toda la zona costera hasta Ensenada.
En una primera etapa abarcará 32 kilómetros cuadrados hasta Rosarito, pasando por el centro y Playas de Tijuana.
El modelo de tren propuesto ofrece una capacidad de 300 pasajeros y viajar a una velocidad de 70 kilómetros por hora.
Para la primera etapa se destinarán 10 millones de dólares.
Se construirá bajo un tipo de inversión denominada “privada en consorcio”, con un tipo de financiamiento “privado con retorno al Estado”.
Se estima que la obra genere 1200 empleos directos y 15000 indirectos.
El plazo de construcción del proyecto completo se estima en 22 años, aunque la primera etapa hasta Rosarito es considerada a corto y mediano plazo.