Rosarito
Banda de Guerra y Escolta de niños de preescolar obtienen distinciones a nivel nacional
Por Delia Ruelas
Lo que inició como un proyecto escolar se ha convertido en un orgullo para el municipio, se trata de la Banda de Guerra y Escolta de niños del preescolar Carmen Serdán, equipos que han representado a Baja California a nivel nacional en diversas competencias.
No ha sido una labor sencilla, pues para trabajar con niños se requiere mucha paciencia y perseverancia, sin embargo, el esfuerzo ha sido extraordinario, además el proyecto ha contribuido a la unión y compromiso de los padres de familia quienes se han abocado a fomentar valores cívicos y responsabilidades a los niños de cuatro a cinco años.
“El logro principal es que el padre de familia se ha involucrado al cien por ciento, entre los papás hemos conseguido que los niños actúen de tal manera hasta conseguir los últimos logros”, señaló el instructor de las cuadrillas, Daniel García Porras.
Durante el 2019 se obtuvo dos grandes logros tanto para la Banda de Guerra y la Escolta que compitieron en Mazatlán, logrando el cuarto lugar a nivel nacional, por primera vez Rosarito, representando a Baja California compitió en una categoría como tal, lo cual, nos llenó de orgullo, señaló García Porras.
Cabe señalar que durante el último ciclo escolar la Banda de Guerra ascendió a subcampeón nacional en un concurso realizado en la ciudad de México, donde los niños participaron sin guía durante la competencia.
Durante los ensayos no hay distracciones ni tiempo para juegos, pues, a pesar de su corta edad, saben de la responsabilidad tan grande que representan. En el lugar de ensayo se han eliminado distracciones, sin embargo, se dan diminutos descansos a cada equipo para volver a retomar el ensayo.
Cada padre de familia lleva un premio en cada ensayo para continuar con la motivación de los niños, lo cual, ha servido para seguir con el único proyecto de Banda de Guerra y Escolta con alumnos de preescolar.
“El niño quiere jugar se distrae, nosotros vamos formando una estrategia para obtener la atención, ensayamos en lugares donde no haya juegos ni distracciones. La atracción en la Banda de Guerra es el tambor, ellos se emocionan y se divierten pues lo ven como un juguete. No se espera ni se les exige como a los grupos de mayor edad, con los niños el logro más grande se inculca poco a poco, con una rutina que van desarrollando desde cero”.