Wilber Ahumada, Coordinador de Control Animal de Rosarito, y Presidente de la Federación de Colegios Veterinarios, realizó una denuncia pública por actos de corrupción y abuso, en el Departamento de Control Animal Municipal. Dicha denuncia se basa en hechos graves y alarmantes que afectan no solo la integridad de las mascotas en resguardo de la Perrera sino también de sus trabajadores.
El documento señala la falta de respeto al Médico Veterinario, ya que desde que asumió el puesto de Coordinador, ha observado que el papel del médico veterinario en dicho departamento ha sido relegado a un mero formalismo.
La cédula profesional de un veterinario es vista como un simple requisito administrativo, pero no se le da el espacio ni las condiciones adecuadas para realizar su labor. No existen los recursos básicos como herramientas, material o infraestructura, y mucho menos un respeto real a las capacidades y responsabilidades que el cargo requiere.
En segundo lugar, el médico veterinario denunció “Corrupción y Abuso de Poder”, pues el empleado de Control Animal, de nombre llario, se cree el “coordinador” del departamento, incluso se ha apropiado de la autoridad y la ética profesional del puesto.
“Este individuo, quien debería velar por el bienestar animal, está utilizando los recursos del municipio de manera ilegal, vendiendo la croqueta donada por la ciudadanía para los perros en la perrera en su propia tienda. Este acto no solo es un robo, sino una clara falta de respeto a la comunidad. Además, llario está involucrado en actividades ilegales, como el consumo de drogas mientras usa vehículos oficiales”, señala el denunciante.
Por otra parte denunció, “Condiciones Inadecuadas y Riesgo para la Salud Pública”, ya que el Departamento de Control Animal está en una situación de total desorganización y corrupción. La falta de insumos, materiales y personal capacitado ha impedido llevar a cabo las esterilizaciones, la vacunación y las cirugías necesarias para controlar las zonas y proteger la salud pública.
“He tenido que realizar intervenciones quirúrgicas con la ayuda de alumnos de la Facultad de Veterinaria, sin acceso a los insumos adecuados. Este desamparo pone en riesgo la seguridad y salud de los habitantes de Playas de Rosarito”.
Otro señalamiento es por “Acoso y Amenazas”, el ambiente de trabajo en el departamento es completamente insostenible. “El personal está siendo hostigado y amenazado, tanto física como psicológicamente. Existe un claro acoso sexual dirigido hacia las enfermeras y sus parejas. Además, el personal de Control Animal ha sido presionado para mantenerse en silencio, temiendo represalias de los individuos que controlan el departamento. Esta situación es intolerable y pone en peligro la integridad de los trabajadores y el bienestar de los animales”.
También se denuncia “Desaparición de Material y Equipos”, además se solicita una “Auditoría y Medidas Correctivas”, con el fin de que las autoridades competentes tomen acción.
“Solicitó la auditoría inmediata al Departamento de Control Animal de Playas de Rosarito. Es imperativo que se revisen los organigramas, el parque vehicular, los insumos, y el material destinado para la atención de los animales. Debe eliminarse la corrupción y garantizar que los recursos sean utilizados de manera ética y responsable”.
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